Las esporas de Aspergillus están por todas partes, por lo que la infección puede producirse casi en cualquier momento antes y después de la cosecha. Para reducir los riesgos, es importante centrarse en cuándo se dan las condiciones favorables para la infección. Una mayor infección por el hongo implica un mayor riesgo de aflatoxina.
Al comprender cuándo es más probable que se produzca la infección, los investigadores diseñan intervenciones para reducir la posibilidad de que aparezcan hongos.
Esos tiempos incluyen:
- En el campo, sobre todo al final del periodo vegetativo
- En el campo cuando se retrasa la cosecha
- Como las plantas se secan después de cavar
- Al secarse las vainas
- En almacén