Los cacahuetes deben cosecharse cuando la mayoría de las vainas (al menos el 75%) estén maduras, o cuando la mayoría de las vainas estén negras o marrones por dentro.
Sin embargo, es difícil cosechar cacahuetes en terrenos secos y duros, por lo que si la temporada de lluvias ha terminado puede ser necesario cosechar los cacahuetes antes de que estén todos maduros.
Si los tallos de los cacahuetes empiezan a debilitarse, conviene cosecharlos para evitar que se pierdan vainas en el suelo.