Entre 2 y 4 semanas antes del inicio de las lluvias, el agricultor debe empezar a preparar el campo.
- Limpia el campo de malas hierbas.
- Labre el suelo a una profundidad mínima de 15 cm para aflojar la tierra, de modo que las estacas de la planta puedan penetrar en el suelo y puedan desarrollarse las vainas.
- Considere la posibilidad de incorporar fertilizantes y cal.
Muchos agricultores forman filas en caballones, formando un lecho alto. Esto ayuda a drenar el campo después de fuertes lluvias y evitar daños por inundación. Algunos agricultores crean “caballones atados” construyendo un pequeño caballón de tierra perpendicular a las hileras cada 2 metros para ayudar a reducir la erosión y mantener el agua en las hileras.